Una persona mayor va perdiendo la capacidad de sentir sed. Al no sentir sed, no bebe líquidos o lo hace en poca cantidad, lo que aumenta el riesgo de deshidratación, y la función renal se va deteriorando.
Por eso, en la residencia Ntra. Sra. del Pilar de Collado, además de las 4 comidas del día (desayuno, comida, merienda y cena), se realiza el reparto de líquidos entre las comidas, y se estimula especialmente a aquellas personas que, por su deterioro cognitivo, no quieren tomarlos.